MUSEO EDUARDO BARREIROS 
       
        El edificio del Museo Barreiros se encuentra en el interior de una gran 
        finca, construido en hormigón y grandes zonas acristaladas que 
        iluminan de forma natural la mayor parte de los vehículos expuestos. 
        En la planta baja encontramos dos motores, uno diesel que es una transformación 
        de un motor de gasolina (de las primeras transformaciones, un 3HC), el 
        otro motor es de gasolina pero que puede transformarse a diesel y al revés, 
        en poco tiempo, unas 3 ó 4 horas. 
        Como muestra de los vehículos industriales que produjo Barreiros 
        están expuestos un Barreiros Saeta 75, y el “Abuelo”, 
        dos tractores, un autocar y una carretilla elevadora. El Saeta 75 se construyó 
        en 3 versiones; normal, corto y largo con un motor de 6 cilindros y 5.010cc, 
        y una potencia de 90cv a 2.400r.p.m. Con una cabina panorámic totalmente 
        metálica., caja de cambio de 5 velocidades y marcha atrás, 
        frenos de aire comprimido y disponía de 3 asientos. EL “Abuelo 
        “es una réplica del prototipo que se construyo para ganar 
        el concurso para el ejército portugués, que Barreiros ganó 
        construyendo 300 vehículos del mismo. Con motor EB 6 y utilizando 
        piezas de otros camiones tiene la particularidad de las ruedas con forma 
        elipsoidal. Delante de él encontramos una maqueta del mismo. Un 
        pequeño autocar Barreiros restaurado, de 22 plazas más conductor, 
        conocido en algunos lugares como “el conguito”. Dos tractores 
        expuestos: un Hanomag- Barreiros R350 y un R440, de la primera época 
        de unión con el fabricante alemán. La carretilla elevadora 
        es un producto enteramente Barreiros, que dieron un resultado excelente 
        a pesar de no ser un especialista en este campo, y que todavía 
        hoy siguen funcionando en alguna empresa como el primer día. 
        La fabricación de automóviles esta representada en el Museo 
        por un Simca 900 GLE de primera época y otro Simca1000 GLS de la 
        última época de su fabricación, coches tipo utilitario 
        que competían con el Seat 600 y 850 pero eran más amplios 
        y tenían mejores prestaciones. Como representación de la 
        gama alta, más lujosa, encontramos expuesto un Dodge Dart, de la 
        primera época matriculado en 1965, de faros redondos, dotado de 
        aire acondicionado, (creo que debió de montarse posteriormente), 
        y toda clase de lujos para la época. 
        El resto de la planta baja tiene varias mesas con diversos elementos de 
        taller, bancos de pruebas, balanzas, bombas inyectoras, motores y toda 
        clase de instrumentos de medición. Las paredes están cubiertas 
        con paneles informativos sobre: las empresas Barreiros, producción, 
        concesionarios en España. Planos con secciones y alzados de piezas 
        y grandes fotografías del interior de la fábrica de Villaverde 
        clarifican y encuadran perfectamente la exposición de los vehículos 
        allí presentes. 
        En la segunda planta encontramos en el centro del espacio una gran maqueta 
        de la fábrica de Villaverde, junto a motores marinos, estacionarios 
        junto a prototipos de motores de su última época. Se encuentra 
        también una maqueta de la cabina CP 67, un diseño de Mario 
        Gamarra, enteramente español, sin influencias, mejorando la antigua 
        cabina Berliet. Las paredes vuelven a estar cubiertas con paneles explicativos 
        sobre las diferentes producciones de camiones, autobuses, coches, motores, 
        furgonetas, etc todo lo que Barreiros fabricó. En la zona más 
        íntima de la segunda planta encontramos el antiguo despacho de 
        Don Eduardo, con sus materiales de trabajo, fotografías familiares 
        y recuerdos. Un camión de juguete de la marca Paya preside la mesa 
        junto a una foto del Rey y Don Eduardo. Las vitrinas de la parte posterior 
        están abarrotadas de insignias, llaveros, maquetas, reconocimiento 
        personales a Don Eduardo, placas de agradecimientos de asociaciones y 
        clubs. 
       
       
        
        
        
        
        
        
        
        
        
        
        
        
        
        
        
        
      volver 
        a página de inicio  
       |